24 horas por Oporto

Como ya he comentado en otros viajes relámpago, como el de Bilbao, 24 horas para visitar una ciudad como Oporto es poco tiempo, muy poco. Pero si es suficiente para descubrir lo maravillosa que es esa ciudad y asegurarte que vas a volver para disfrutarla más tiempo. Aunque he estado en varias ocasiones en Portugal, nunca había tenido la oportunidad de conocer Oporto, ahora, gracias a Fuji, tuve el placer de visitarla y fotografiarla al ir para dar una pequeña charla sobre la nueva Fujifilm X-E3 de la que fui “betatester” este pasado verano. Pero no nos perdamos, hablemos de Oporto.
Situada al norte de Portugal, junto a la desembocadura del río Duero, cuenta con más de 1,7 millones de habitantes, siendo así la segunda ciudad más grande del país por detrás de Lisboa.

Por su tamaño es una ciudad ideal para recorrerla andando, sus iglesias barrocas, su aire decadente y la vida que se respira en ella hacen que se disfrute andando por las estrechas calles del distrito de Ribeira, el más antiguo de la ciudad. Callejuelas empedradas llenas de historia que nos transportan a otra época, no en vano, su casco antiguo ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Si puedes, disfruta de un paseo al anochecer junto a la ribera del Duero que siempre es el telón de fondo de la ciudad, ver sus puentes y su animada vida nocturna lo convierten en una experiencia fantástica.

Para los amantes del vino, en la otra orilla del Duero, en Vila Nova de Gaia, encontraréis enormes bodegas donde degustar un buen Oporto. Y si teneís la fortuna de quedaros más días, la ciudad es una buena base para conocer el norte o el centro de Portugal y visitar ciudades como Guimarães, Braga o Aveiro.

Oporto es una ciudad vibrante que poco a poco se está convirtiendo en uno de los destinos preferidos por los turistas europeos. Su cercanía y los muchos vuelos que nos pueden llevar la convierten en una ciudad ideal para visitar desde nuestro país.