Conclusiones como beta tester de la nueva Fujifilm XE-3
Este verano he tenido el privilegio de que Fujifilm confiara en mí para ser uno de los testers que ha probado en exclusiva la nueva incorporación a la familia de la Serie X, la cuarta versión de las XE, la nueva XE-3.
Fue amor a primera vista (o a primer contacto). La estética retro de la hermana pequeña de la X-Pro2 cuenta con toda la tecnología de sus hermanas mayores, como mi XT-2, pero se presenta como la más ligera y pequeña de la familia de objetivos intercambiables y con visor de Fujifilm.
En cuanto a su diseño, es perfectamente reconocible, sigue la línea telemétrica retro de sus antecesoras, pero un poco más pequeña que la XE-2S. Aunque se presenta con ciertos cambios, como la desaparición del flash integrado, pero que a su vez incluye en la caja como accesorio el EF-X8, un pequeño flash más potente que el que usa las demás cámaras de la familia que lo llevan integrado.
El gran cambio aparece en la parte trasera. El D-Pad desaparece del todo para ser substituido por un joystick y por el deslizamiento hacia los lados o arriba o abajo en la pantalla táctil para que aparezcan las funciones que teníamos marcadas en la cruceta del D-Pad en modelos anteriores.
La pantalla LCD pasa a ser fija, no viene a diferencia de otras Fuji con la posibilidad de ser abatible. Eso sí, te permite funciones nuevas como el de aparecer opciones con un simple movimiento tal y como comentaba en el punto anterior o el hecho de poder ampliar las fotos con los dedos, tal y como lo hacemos con nuestros smartphones.
Otra novedad es la aparición de la rueda delantera, que en mi caso configuré con el ISO.
Otras novedades que presenta son la incorporación del nuevo procesador y sensor, avanzando del APS-C de 16,3 megapíxels de su antecesora al X-Trans CMOS III de 24,3 Mp, o el procesador X Procesor Pro, igualando a sus hermanas más actuales, o la opción de poder realizar ráfagas de hasta 14 fotos por segundo con el obturador electrónico, grabación de video a 4k, o un tiempo de encendido más rápido.
De todas las novedades, en la Beta que probé una que no estaba aún implementada y tengo muchas ganas de trastear, era la incorporación del Bluetooth. Para mi trabajo, el hecho de que la cámara esté permanentemente conectada a mi teléfono es una función que he deseado en todas mis anteriores cámaras. Poder enviarme las imágenes de una forma rápida para poder subirlas en las redes sociales del trabajo inmediatamente y después ya trabajar con el RAW para la versión impresa es una gran ventaja para mí.
Una de las principales mejoras comparado incluso con mi XT-2 es la novedad en el algoritmo de enfoque, con una mejora del rendimiento y una mejora en el seguimiento de objetos o personas. Una gran ventaja en trabajos como el mío y que Fuji ha decidido implementar en actualizaciones de la XT-2.
El pack que incluye la óptica 23mm f2 R WR, es mi preferido, son el matrimonio perfecto. En mi opinión, para todos los que estáis enamorados perdidamente da la X1ooT, pero siempre habéis querido pasar a usar una Fuji con objetivos intercambiables o para todos los que queráis renovar el equipo, pero no ir a las mayores como la X-Pro2 o la XT-2, esta es vuestra cámara.
Este 19 y 20 de septiembre tuve la oportunidad de ir a la presentación que se realizó en Oporto, donde pude explicar mi experiencia con la cámara y ver la opción en plata y negro, que me ha gustado más todavía. Así como la ciudad de Oporto, quiero volver y fotografiar todas sus maravillosas calles.
En conclusión y repitiendo la frase que define en la nota de prensa de la nueva XE-3, es la “Compañera perfecta para el uso diario y la fotografía de viajes” y añadiría para la fotografía callejera.
A continuación os dejo algunas fotos que realicé por Barcelona testeando la cámara, y el video (hyperlapse) que hice durante las pruebas de la misma. Las imágenes son directas jpg de la cámara porque el RAW aún no está para la XE-3.